Hernando gracias por tu blog, la lista de lo pendiente y de las nuevas prioridades listadas en tu blog, nos da un marco muy importante de reflexión.
Yo empezaré con aquello que me ha preocupado más en este último mes.
En el caso del Perú, siempre tuvimos el foco en el impulso de la pequeña agricultura familiar como base de la superación de la pobreza.
Sin embargo, el COVID nos ha puesto al frente las grandes necesidades no atendidas por los últimos gobiernos: los servicios de salud rural, la educación rural, el no tener gobiernos regionales y municipales eficientes y efectivos.
Hoy vemos con tristeza que todo aquello que no enfrentamos a tiempo generan un terrible efecto en las regiones y en las familias rurales. El desarrollo territorial, se nos presenta como una necesidad imperiosa para fortalecer las capacidades de las zonas rurales.
Como políticas de corto plazo requerimos fortalecer los sistemas de salud rurales, el impulso a la educación rural y tener un marco legal que permita una gobernanza eficiente y efectiva en las regiones. Esto debe sumarse al trabajo continuo de fortalecer las capacidades de los productores y productoras del campo para la producción, gestión y comercialización de sus productos.
En lo inmediato se nos presentan como grandes desafíos: la organización de los productores, nuevas formas de comercialización y expendio de productos, junto a ello los temas de sanidad, la inocuidad, y la trazabilidad de los productos.
Este es un primer comentario, seguimos conversando.
La Agenda pendiente
Hernando gracias por tu blog, la lista de lo pendiente y de las nuevas prioridades listadas en tu blog, nos da un marco muy importante de reflexión.
Yo empezaré con aquello que me ha preocupado más en este último mes.
En el caso del Perú, siempre tuvimos el foco en el impulso de la pequeña agricultura familiar como base de la superación de la pobreza.
Sin embargo, el COVID nos ha puesto al frente las grandes necesidades no atendidas por los últimos gobiernos: los servicios de salud rural, la educación rural, el no tener gobiernos regionales y municipales eficientes y efectivos.
Hoy vemos con tristeza que todo aquello que no enfrentamos a tiempo generan un terrible efecto en las regiones y en las familias rurales. El desarrollo territorial, se nos presenta como una necesidad imperiosa para fortalecer las capacidades de las zonas rurales.
Como políticas de corto plazo requerimos fortalecer los sistemas de salud rurales, el impulso a la educación rural y tener un marco legal que permita una gobernanza eficiente y efectiva en las regiones. Esto debe sumarse al trabajo continuo de fortalecer las capacidades de los productores y productoras del campo para la producción, gestión y comercialización de sus productos.
En lo inmediato se nos presentan como grandes desafíos: la organización de los productores, nuevas formas de comercialización y expendio de productos, junto a ello los temas de sanidad, la inocuidad, y la trazabilidad de los productos.
Este es un primer comentario, seguimos conversando.